Paco Meralgo/Restaurante Valldaura/Vaso de Oro, Barcelona: El Amor Entra Por La Cocina Catalana

Muy bien, vamos a hablar claro. Durante mis primeros días de viaje, me puse con comemierderias y me metí en cuanto restaurante “fichu” puede averiguar o me recomendaron. Mucho diseño, mucho “fusion cuisine” o comida “exótica” (tailandesa, japonesa, etc.). Pero mientras disfrutaba de ellas, me privaba, por otro lado, de las delicias de la comida típica de la región. Afortunadamente, no estaba demasiado tarde para hacer enmiendas y en mis últimos días en Barcelona lo que hice fue comer “catalán” a todo lo que da.

¡DIOOOOOOOOS! ¡Las delicias que probé!

Una noche fui a tapear al restaurante Paco Meralgo. Aparte del nombre TAN charro, la comida estaba de maravilla. Llegamos un poco tarde (cerca de la medianoche) y decidimos sentarnos en la barra y degustar algunos platillos. Pedimos:

• Gambas (Camarones) al Ajillo

• Tostadas con Foie (Hígado de Pato)

• Croquetas de Jamón

• Croquetas de Pollo

• Escalibada

• Pan con Tomate

• Brie Fundido

• Calamarcitos "a la llauna"

• Dados (Puntas) de Filete a la Pimienta



Comí de todo y todo estaba sabroso. El plato favorito: las Tostadas con Foie. Era tan delicioso que creo que hasta se me aceleró el pulso. Anteriormente sólo había comido foie en los “spreads” tecatos que sirven en las fiestas. ¡Con este quede “hookea” al momento!



Mención de honor lleva también la Escalibada (vegetales asados, pelados y sazonados). No es un plato del otro mundo, pero me gusto muchísimo. No debo olvidar los Dados de Filete, que cocidos a punto son un manjar para el paladar.

Salimos de allí muy satisfechos, a pesar de que nos trataron a pata por el fondillo. Aparentemente éramos los únicos dos comensales que quedábamos y estaban locos por cerrar el sitio.

Al otro día le conté a mi amigo Beto sobre mi nuevo amor por el foie y prometió llevarme a un lugar donde, según él, lo preparaban riquísimo: la Cervecería El Vaso de Oro. Pero en eso nos llamó otro amigo, Rafa, para que fuéramos a almorzar a un restaurante en la montaña, y claro, la sed de aventura pudo más que el antojo.

Llegamos al Restaurante Valldaura, localizado a mitad de una montaña en Cerdanyola, con buena vista a la ciudad. En el camino Rafa, de chiste advirtió: “este restaurante es de campesinos”. Nada que ver. El lugar no solo era muy pintoresco (una casa rústica, decorada con antigüedades y “par” de ardillas y zorros disecados); era por demás acogedor. Lo mejor es que por todos eso lares YO era la única turista.



Bueno era sábado en la tarde y lo que sobraba era el hambre. Así que decidimos empezar con unas cañas bien frías y pedimos comida como tres verdaderos salvajes. Estos fueron los aperitivos:

• “Do-it-yourself” pan con tomate y ajo – esto me encantó porque te traían el pan tostado con un diente de ajo y un tomate pelado, y TÚ mismo lo frotabas contra el pan.

• All i Oli – aderezo de aceite y ajo, espeso como una mayonesa. Este era preparado en el lugar artesanalmente.

• Escalibada Catalana – a diferencia de la otra Escalibada, esta sólo lleva berenjena y pimientos.

• Surtido de Embutidos

• Girgolas con Calcots - deliciosas setas con cebollines y ajo. ¡Espectaculares!

Más adelante, y como plato principal, los muchachos pidieron el Entrecot de Pato. Yo pedí el Chuletón de Res (a punto), las tres selecciones acompañadas por Patatas (Papitas) Fritas.

Y pues, como era de esperar, una vez más la comida estaba increíblemente sabrosa. Mi Chuletón era tan y tan gigantesco que después de comer bastante de una esquina y otra, todavía parecía que estaba completo.



Por suerte las cantidades eran bastante grandes y alcance a probar del Entrecot de Pato. Lo primero que me pasó por la mente fue: “¡¡¡¡Maldición debí haber pedido esto!!!!”. Una vez más había quedado loca y sin idea con lo rico de este plato. Por suerte le hice ojitos a Beto par de veces y logre “jocear” más.

Y si pensaban que esto acababa aquí… ¡pues estaban BIEN equivocados! ¡Había que pedir postre! Y como andábamos así en la onda de lo típico pedimos un Mel i Matto y un Sorbet de Limón ,“pisaitos” con unos “chupitos” de orujo para la buena digestión.

El Mel i Matto es simplemente queso blanco con miel. El contraste entre ambos tiene como resultado un sabor sencillo, pero diferente. No está nada mal, pero sigo prefiriendo postres más decadentes (en especial los confeccionados con chocolate y/o cremas).

De los chupitos, que como ya mencione son unos digestivos, probé las dos variedades que ofrecían: el regular y el “sazonado” o curado con hierbas. Ambos provocan un calentón rico cuando bajan por la garganta, pero el regular sabia mucho a licor puro. El orujo con hierbas tenía mejor sabor, un gustito que realmente no puedo describir más que como una sensación buena.

Par de chupitos más tarde, salimos de allí “jendios” y “jartos” como sapos. Pero siendo esa mi última noche en la cuidad, después de echarme un “power nap”, decidí que no era posible que me marchara de ahí sin visitar un último lugar…

Llegamos a El Vaso de Oro, en Barceloneta (si, ¡Barceloneta!) al filo de la medianoche. Estaba lleno a capacidad y fue casi imposible entrar.



Una de las cosas más particulares de este lugar es que es bastante estrecho y se come de pie. Si mal no recuerdo habían solo dos o tres mesas con sillas altas. Tu llegas, te acomodas por la barra que bordea todo el “counter” y estas “hustling” hasta que te consigues un “spot” y pides.



La cerveza en este lugar es muy famosa. Así que pedimos par de flautas de cerveza pa’ empezar la noche bien. Yo fui allí bajo la promesa de foie con solomillo, así que esa fue mi única exigencia. Deje que el experto pidiera. Y ante mis ojos ví como nos preparaban todas estas maravillas:

• Longaniza

• Atún Picante

• Un Granjerito – un sandwich del cual no tengo idea de los ingredientes

• Foie Con Solomillo (Fua, como lo llaman allá)

Tengo una sola palabra para describir lo que comimos: IMPRESIONANTE. El foie fue absolutamente el MEJOR de los tres que probé, creo que por la combinación con la carne. No le digo más porque ya se me acabaron los adjetivos para describir lo rica que es la comida catalana. Luego hubo más flautas y unos chupitos, estos últimos cortesía de la casa y gracias al taxista que nos llevó hasta el lugar, que casualmente recién había dejado de trabajar allí.



Y así fue. Comimos, bebimos y jodimos al estilo catalán. En otras palabras: misión cumplida.


Precio $20 - $40 pp

Paco Meralgo
Muntaner, 171
Barcelona
93.430.90.27


Precio $20 - $40 pp

Restaurante Valldaura
93.427.62.02


Precio < $20 pp

Cervercería El Vaso De Oro
Balboa, 7
Barcelona
93.319.30.98

(Fotos Vaso de Oro/Valldaura por Mara)

Sorry Ping Mal Dado

Pronto posteo los 2 que me quedan de Barcelona y empiezo con el fracatan de cosas que han pasado por acá de enero pa' 'ca. El 10k me tiene super esbarata'. BBS.

Bikini, Barcelona: La Segunda Parada En el “Tour” De La Destrucción

Luego de haberme esbaratao’ el martes, la noche siguiente decidí tirarme a la calle para un segundo “round”. Y por lo que pude averiguar con mis contactos de la noche anterior, los miércoles todos los caminos conducían a la Sala Bikini, para el party Black Music Bikini, del grupo Lo Mejor de Barcelona.

Por compromisos previos, no fue hasta la 1:30 AM que pude tirarme para allá. Yo iba un poco apurada, porque pensé que se me había hecho tarde. ¡Ja! ¡Que ilusa! Llegue allí y luego de entrar con mi cara de lechuga (más tarde descubrí que para entrar hay que estar anotado en la lista) vi que había bien poca gente en la disco, que es bastante grande.

Cuando entras chequeas tu “coat” y bajas las escaleras a los distintos salones. Hay tres salones en la parte de abajo.

El central y más grande es donde esta la pista de baile. Hay dos barras a los lados, donde pedir es relativamente fácil. Las luces y las proyecciones en una pantalla no me impresionaron para nada.

Al principio casi nadie estaba bailando. Entonces el DJ se tiró el “set” de “gansta beats” y un corillito que se meneaba muy bien se metió a la pista y “pompearon” a todo el mundo. En cuestión de media hora (2:00 AM), la pista y el resto del sitio se habían llenado.

Eso si, aquí también te clavan con los palos (¡¡¡¡9 euros!!!!) y si tomas vodka andas medio jodio porque no hay jugo de “cranberry” (que creo que allá le dicen de arándanos). Y cuando pides “vodka naranja” te la dan con Schweppes (una bebida de carbonatada casi como la Fanta de china, ¡ugghhh!), a menos que no la pidas con zumo de naranja.

Bueno llegó el momento de seguir explorando. A derecha del área principal esta una salón que es mas relax. Hay una barrita de lo más nítida, hay lugar donde sentarse a hablar y la música allí es mucho más chillin’.

Entonces a mano izquierda esta el salón VIP. Esta fue el área que a mi no me hizo mucho sentido. Primero que se ponen un poco “jodones” para dejar a algunas personas entrar, pero al final tooooooodo el mundo entra (mal rato innecesario). Segundo que en el mismo medio del salón, tiraron una correa que lo dividiá en dos y tenias que pasar por un segundo “bouncer” (lo cual es una verdadera estupidez) para entrar al otro lado del mismo lugar. La música aquí era igual que la del salón principal. Al final de la noche casi todo el mundo terminó metido allí y la cosa se puso medio insoportable.

En resumidas cuentas, la pase brutal en el Bikini; baile muchísimo y conocí mucha gente. De hecho me sorprendió bastante haber visto a algunos de los que ví o conocí la noche antes en Up and Down y Buda (esto de que la gente se mueve en los mismos círculos no pasa solo en Puerto Rico porque somos chiquitos, es así en todo el mundo). Pero lo mejor de la noche fue el “mix” tan interesante de gente y música que dió allí.


Bikini
C. Deu i Mata, 105
Barcelona
93.322.08.00

Qu Qu, Barcelona: Desayuno rápido y sabroso.

Como durante mi estadía en Barcelona me negué a comer en un restaurante de comida rápida americana cuando había tantos lugares sabrosos para conocer, un día que estaba apretada de tiempo me aventure a la Paseo de Gracia y me di con Qu Qu (ay Camille, rápido pense en tí).

Este restaurantito, ubicado en el antiguo local de una bodega, tenía su cocina a simple vista desde la calle. Esto me llenó el ojo inmediatamente con la promesa de comida rica y fresca.

Así que entre, me senté y con muchísimo gusto me comí una Truita de Patata y Ceba (tortilla española con cebolla), acompañada de una ración de Tomáquet (pan crocante con tomate), que más adelante descubrí que es un aperitivo típico de la región de Cataluña.

Todo estaba sabroso y el servicio fue excelente. Qu Qu es una buena opción para una cómida rápida que te satisface.

Precio: < $20 pp

Qu Qu (Quasi-Queviures)
Passeig de Gracia, 24
Barcelona
93 317.45.12

Buda Bar y Up and Down, Barcelona: Crónica De Una Noche de Pura Joda

Si alguien me preguntará: “De todos los días que uno puede salir a “partisear” duro en la semana, ¿cual es el día que tu crees que más se jode? Bueno hace tres semanas atrás, mi contestación JAMAS hubiera sido: “¡Pues los MARTES!”. Claro esto hasta que salí en la noche oficial del “fichureo” y la “gamberreria” en Barcelona, el Model’s Night en algunos de los clubes más “happenin” de la ciudad.

Les confieso que caí donde caí por casualidad. Queria ir a un lugar nítido y cerca del Hotel a cenar, para luego seguirlo a unos bares en la Rambla. ¡Ja! Eso nunca llegó a ocurrir.

Me fui a cenar al Buda Bar, un restaurante muy interesante de fusión de cocina mediterránea y oriental (que dicen las malas lenguas que tiene que ver con el famosísimo Budha Bar en Francia). El lugar esta BIEEEEEEN cabrón. El local se siente gigantesco, aunque realmente no lo es. Todos los detalles de la decoración están muy, pero que muy bien cuidados (demás esta decir que el tema es Buda y lo asiático).

Bueno, llegué, y por suerte pude cenar sin tener reservación. Pero, contrario a lo que yo esperaba (una mesa discreta en alguna esquina, donde no llamara la atención una mujer comiendo sola), me tocó la mesa en el mismo centro del restaurante, frente a la estatua gigantesca de Buda (*gulp*). Aquí no había manera de pasar desapercibida.


Primero me trajeron unas nueces con especias medio picosas y pan. Me sirvieron el vino de la casa (hey, porque en allá hasta el vino más “tecato” es bueno) y pedí, para comenzar, el plato de raviolis rellenos de setas en una salsa de crema (este plato me casi me lleva al “nirvana”). Luego lo seguí con un solomillo a punto, acompañado lo que parecía ser un tipo lasaña, pero confeccionada con papas y queso (este plato, igual que el anterior me tenia extasiada).

Cuando el “host” me preguntó que tal la comida, le conteste que estaba tan deliciosa que esta era la única razón por la que le perdonaba que me hubiera sentado en el “frikin” medio del restaurante. El me contestó que para que no cenara sola, me sentó con Buda, y me invito a quedarme en esta área del restaurante, que en unos minutos se convertiría en el salón VIP, para presentarme a unos “primos” suyos que estaban visitando de Sevilla.


Para hacer un cuento largo corto, luego de conocer par de gente interesante y haber tenido una noche de flirteo intensa, conocí a esta “tía” de Girona, Laura, que decidió adoptarme y me invitó a seguir con ella y su corillo una disco, el Up and Down, después que el Buda cerró.

Entramos al Up And Down (de este no hay fotos…sorry), sin hacer fila ni pagar (evidentemente esta gente son regulares). Esta disco es grande, y el "layout” me acuerda un poco a Tequila en Buenos Aires. Amplia, toda decorada de blanco, con una pista de baile redonda en el centro, rodeada por “booths” y sofas, con dos barras principales. Hay dos niveles (por eso el nombre), pero nunca llegue Arriba. Y Abajo, pues, Abajo era mejor. La música estaba “super pompea”, la pista estaba llena, y al igual que en el Buda, mucha gente linda (y el que no era lindo tenia un estilazo muy funky).

Eso si, las copas (tragos) son caras. ¡10 euros "a pop"! Además hay un costo de entrada (“cover charge”) que esta entre los 12 y 17 euros.

Bueno allí se pasó de "puta madre", siendo uno de los “highlights” cuando el DJ se tiró el set de reggaeton, que incluyó a Daddy Yankee, Wisin y Yandel y Don Omar. Cuando cerraron el Up and Down, decidimos seguirlo, y entre la indesición de si ir a una barra/antro (cuyo nobre ni me acuerdo) o ver a casa de quién ibamos para seguir bebiendo, la mañana llegó. Llegue al hotel como a las 8 de mañana…

De verdad que esta ha sido una de las noches más divertidas de mi vida. Esto valida el famoso cliche de que las mejores cosas son las que no se planifican.

Precio (Restaurante): $40 - $60 pp

Buda Bar
C. Pau Claris, 92
Barcelona
93.318.42.52

Up And Down
C. Numància, 179 (Barrio Alto)
Barcelona
93.205.51.94

El Japonés, Barcelona: Llegué por el sushi, pero me quede por el postre...

Así puedo resumir mi experiencia en el muy cotizado restaurante El Japonés, localizado en un callejón bastante exclusivo cerca de Paseo de Gracia (Passeig de Gracia). Este lugar estilo “comedor” es visualmente muy atractivo.

La decoración aunque ultra moderna, es relativamente sencilla y sobria. El menú tiene bastantes platos poco comunes, perfectos para pedir muchos si vas en grupo y degustar.


En mi caso, ya que andaba sola, opte por pedir sólo tres platos: un Carpaccio de Ternera, que estaba bueno; un Maki de Atún (“hot tuna roll”), que sabia, pues, a “hot tuna”; y mi opción más atrevida, Tori No Tempura (tempura de pollo), lo cual desgraciadamente resultó ser bastante raro, y hasta cierto punto desagradable.

En general la comida estuvo bien. Nada muy impresionante, pero el ambiente en el lugar es buenísimo. Ahora, cuando llegó la hora del postre decidí que no podia marcharme sin probar uno muy mencionado en las reseñas del lugar: Sopa Oriental de Yogur con Curry y Chocolate.

¡Mmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmm!

Este es uno de los postres más exquisitamente complicados que he probado en mi vida. No era frío, pero tampoco tibio. Los sabores del curry y el chocolate chocaban sobre la neutralidad del yogur, al punto de que ya mi cerebro no podia con los contrastes. Saborear esto fue una experiencia única, pero que definitivamente no es para todos los gustos.


En resumidas cuentas, si me tocara regresar a El Japonés, lo haría. Me quedaron muchos platos por probar que quizás son mejores que los que pedí, y no dejaría pasar la oportunidad de comer este postre de nuevo por nada.

Precio: $20 - $40 pp

El Japonés del Tragaluz
Pje. Concepción, 2
Barcelona
93 487.25.92

(Fotos por Mara)

Sandwich & Friends, Barcelona: ¿Estas listo para comerte un sandwich “chic”?

Pues bienvenido a Sandwich & Friends, una franquicia de lo que yo llamo “sandwicheras de diseñador”, donde lo mismo entras a comerte uno de los sobre cuarenta sandwiches en el menú o a darte unas “caña” o un café con tus amigos.

Lo que hace a este lugar increíblemente “cool” es que las paredes están cubiertas con las famosas ilustraciones de Jordi Labanda, cuyo trabajo se conoce aquí por unas líneas de libretas y otros artículos de oficina con estilo super moderno.


Luego de estudiar el menú (vale la pena mencionar que cada sanwich tiene un nombre particular) decidí pedir un Sergi, que es un enrollado (básicamente el pan convertido en un rollito) de pollo y tocineta, acompañado de una Estrella de barril (ambas cosas me cayeron como anillo al dedo). Y a recomendación de la camarera (que btw, era una punka con un estilo chulísimo), pedí un Sachet de Chocolate de postre. Este resultó ser un postre muy rico.

Así que ya sabes. Si estas en Barcelona, aunque sea date un café en una de las cuatro localidades de Sandwich & Friends.

Precio: < $20 pp

Passeig del Born, 27 (c/Rec)
Barcelona
93 310.07.86

Madrazo, 15 (Via Augusta)
Barcelona
93 415.66.54

Aribau, 179
Barcelona
93 200.45.95

Rambla Catalunya, 5
Barcelona
93 342.73.76

(Fotos por Mara)